28 de enero de 2009

¿Quién dijo que todo está perdido?

Niños de 4 años, personas con Síndrome de Down y otros discapacitados, personas mayores, músicos, deportistas, profesionales y aficionados del teatro...
150 personas. Todos reunidos en un escenario para demostrar que es posible, que se puede lograr mucho con muy poco.




Hace unos días volvimos a escena con la obra de teatro ¿Quién dijo que todo está perdido?. Toda una muestra de trabajo en equipo engrasada por la coordinación entre bastidores. El teatro de integración demostró que las diferencias generacionales, culturales e intelectuales pueden desaparecer sobre el escenario, y en la vida fuera de él.

En escena, la historia de un hombre cuya ambición le deja arruinado. La esperanza que da un niño que te ofrece su mano. ¿Quién dijo que todo está perdido?

Crítica de "La Opinión":

"El lleno absoluto del Teatro El Jardinito y la expectación creada ante la representación de la obra "¿Quién dijo que todo está perdido?", no defraudaron. Al contrario, los casi 160 participantes en esta representación no sólo dieron todo lo mejor que saben sino que consiguieron conectar con el público relacionando un buen conjunto de disciplinas escénicas y musicales. Teatro, sombras chinescas, música, canto, danza, gimnasia rítmica, audiovisuales y cortometraje, fueron las técnicas utilizadas magníficamente coordinadas y con una puesta en escena digna de los mayores elogios"
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