2 de febrero de 2013

Los líderes que nos guían


La Naturaleza la forman millones de escenarios, personajes y tramas. Algunas son bellas, crudas, curiosas, increíbles... otras son atroces. Para bien o para mal, formamos parte de la Naturaleza, incluso como seres sociales, y de todas estas escenas podemos y debemos aprender algo.

Una de las más terribles escenas de la Naturaleza es el llamado Círculo de la Muerte, y es uno de esos sucesos aparentemente inexplicables, como las ballenas varadas en orillas o los suicidios colectivos de los lemmings. En resumen, el círculo de la Muerte lo forma una colonia de hormigas, que en un momento dado todas empiezan a girar en un círculo hasta que inevitablemente van muriendo víctimas del cansancio, la inanición y, tal vez, de la locura:


El vídeo explica que las hormigas soldado que forman estos círculos son ciegas, y que se guían siguiendo el rastro químico que deja la anterior. Si en algún momento las primeras, que van dejando su rastro a las demás, se cruzan con las hormigas que las van siguiendo, pueden confundirse y pensar que éstas son las líderes. Entonces empiezan a seguirlas... y se seguirán ciegamente unas a otras (nunca mejor dicho), hasta la muerte. El vídeo añade además que las hormigas viajan a toda velocidad para llegar lo antes posible a su colonia. No imagino un infierno peor. 

El círculo de la muerte ocurre porque las hormigas líderes se desorientan y cierran el camino en un círculo que sólo desemboca en un trágico final. 

La responsabilidad de los que guían es tal, que si fracasan, no solo fracasan ellos, sino que irremediablemente hunden a los demás, aniquilando a su propia colonia. Somos seres sociales (y vulnerables), y dependemos unos de otros, por lo que si la cúspide de la pirámide, la cabeza que nos guía, está podrida o es incapaz de guiar, toda la población está perdida. 
Para que nuestra sociedad funcione, necesitamos líderes fuertes, honestos y competentes... pero a día de hoy no los hay. Aunque me consta que muchos políticos son honestos y trabajan por el bien común, tenemos muchos líderes incompetentes, usureros, chantajistas, ventajistas, egoístas y egotistas, mafiosos y corruptos. En todos los grupos políticos. Mientras no haya líderes capaces de guiarnos, debemos encontrar un camino, una salida antes de que no podamos escapar de este fatídico círculo de la muerte en el que viajamos TODOS.